Somos polvo & ceniza de un pasado que nos condena hasta el último día. Solía creer en las cenizas de rosas como un símbolo para mí. No sólo por el hermoso vestido que usa la protagonista de El Pájaro Espino, tampoco por la canción de Cerati, sino por lo que fui y ahora soy. Soy Cenizas de Rosas. Flores que abandonaron su color y algún malvado villano decidió quemarlas con suma maldad. Me he vuelto los restos molestos del pasado, cicatrices que llevan a uno a ser literalmente un estorbo. Absolutamente, eso son las cenizas. Luego, comprendí que las rosas era algo demasiado hermoso para mí, y me volví polvo. A fin de cuentas, ese es nuestro eterno final. Somos polvo & cenizas de sueños sin sentidos, de personas que vivieron, fueron alguien y finalmente terminan siendo nada. El ángel mecánico, Tessa en su defecto, dijo que para ella, somos polvo y sombras. Y la chica tenía razón.
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